Que lindo & que triste es recordar.

No sé cómo ni cuándo pero me convertí en una persona terriblemente nostálgica. Creo que hace mucho me siento así y cada vez que llega el verano, ese sentimiento se acentúa. Porque me acuerdo de cosas, me identifico con otras y lloro. Lloro principalmente por nostalgia, o por bronca, casi nunca por tristeza. Pero el tema de mi llanto es aparte, ahora estaba hablando de la nostalgia. La nostalgia (como bien dijo una amiga mía) nos pega en la cara con un palo de golf. Creo que a todos los adolescentes nos pasa porque cada vez son más las personas con las que puedo compartir este sentimiento. Y me identifico muchísimo, lo que me hace ver que hay gente como yo y que gracias a Dios la encontré.

Las cosas que alguna vez viví, viven conmigo permanentemente, caminan de la mano conmigo, las llevo conmigo, porque son parte de mí. Todos y cada uno de mis recuerdos. Por eso digo que soy infantil y que a mi infancia la llevo conmigo a todas partes y que a veces la vivo como si perteneciera al tiempo presente. Y esto lo hago para superar la parte triste de la nostalgia. Porque la nostalgia tiene un poco de alegría y un poco de tristeza pero es casi imposible de separar. Intento, acordarme de por qué me pongo nostálgica y la respuesta siempre es 'por lo mucho que me gustó/disfruté/etc'; hago todo lo posible por poner en práctica la frase 'No llores porque terminó, sonríe porque sucedio' y así me pongo bien de nuevo. O algo parecido, porque la nostalgia no tiene solución, porque por mucho que querramos, no podemos volver el tiempo atrás, ni revivirlo, porque las cosas nunca pasan de la misma manera dos veces.
 Lo único que podemos hacer es llorar con una sonrisa en la cara y sentir cómo nos invade una vez más, el poderoso sentimiento de nostalgia.